Para aquellos que hacen ejercicio regularmente, una pregunta común que surge es: ¿cuál es la temperatura adecuada del agua para darse un baño después de entrenar? El ejercicio es un hábito fundamental para la salud que puede variar en tipo y duración según la edad y las condiciones físicas de cada individuo. 

Sin embargo, el debate sobre si es mejor bañarse con agua fría o caliente después de hacer ejercicio sigue siendo un debate común.

El acto de ducharse después de una sesión de actividad física no solo ayuda a eliminar el sudor y la suciedad, sino que también puede tener un impacto en la recuperación y el bienestar general. Según una publicación del diario Semana, darse una ducha después de hacer ejercicio es ideal para relajar los músculos, prevenir calambres y sentirse con más energía para enfrentar el día.

Sin embargo, la temperatura del agua de la ducha puede ser un factor determinante en la experiencia de recuperación. La reconocida marca deportiva Nike, en su sección de salud y cuidado personal, advierte que bañarse con agua fría después del ejercicio puede ser perjudicial en algunos casos. 

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Se recomienda que, si se opta por el agua fría, esto se haga después de que la persona se haya desacalorado, ya que el cambio brusco de temperatura podría resultar dañino para el cuerpo.

Karly Méndez, especialista en rendimiento humano con un máster en Ciencias de la Fisiología del Deporte en el Memorial Hermann IRONMAN Sports Medicine Institute de Houston, Texas, habló sobre este tema. Según Méndez, es aconsejable esperar al menos 20 minutos después de concluir el ejercicio antes de ducharse con agua fría.

_"Esto se debe a que, después de entrenar, el cuerpo necesita tiempo para enfriarse, específicamente para regresar a una frecuencia cardíaca y una temperatura corporal normales",_ explicó Méndez.

Una vez que el cuerpo ha tenido tiempo de adaptarse a una temperatura más cercana a la normal, el uso del agua fría puede ser beneficioso, especialmente después de una rutina de entrenamiento intensa. Se ha demostrado que el agua fría puede ayudar a prevenir dolores musculares y, además, aumentar las posibilidades de que el cuerpo queme el exceso de grasa.

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Por Analía Méndez2' de lectura

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