Cada 13 de junio, la Iglesia católica recuerda la memoria de san Antonio de Padua, sacerdote franciscano del siglo XIII y considerado doctor de la Iglesia por la importancia de sus escritos teológicos.

Fieles católicos de todo el mundo acuden a su intercesión para todo tipo de favores, pero, tradicionalmente, se lo considera como el patrón de los enamorados y muchos le piden la gracia de conseguir pareja.

**Milagros y origen de la tradición**

¿Cómo surgió esta costumbre? Son varias las versiones sobre el origen, pero, según relatos populares, san Antonio dedicaba parte de su ministerio sacerdotal a orientar a jovencitas para conseguir pareja y evitar que caigan en la prostitución.

Otros relatos decían que las mujeres de su época, para contraer matrimonio, debían entregar un dote, es decir, dinero al hombre, y las que eran pobres quedaban solteras. Se cree que el fraile franciscano les ayudaba a conseguir recursos.

Además, una anécdota muy conocida refiere que un hombre no quería reconocer a su hijo recién nacido por creer que el niño era fruto de una infidelidad. Su esposa acudió al santo y, según relatos, este ordenó al bebé que hable en nombre de Dios y ocurrió el milagro: el pequeño dijo al señor “Tú eres mi padre”, poniendo fin al conflicto.

Si bien algunos acostumbran poner de cabeza la imagen del santo portugués, esta práctica es criticada por la Iglesia por considerarla una superstición.

Vía: P. José de Jesús Aguilar Valdés (YouTube)


¿Por qué a san Antonio se le pide pareja?

Por Víctor Martínez2' de lectura

Hoy, millones de católicos celebran el día de este popular santo.