En Villarrica lo conocen como “Yuyero sexy” o “Yuyito del amor” por sus ojos azules. Se trata de Alejandro Daniel Giménez, un árbitro que, además de impartir justicia en partidos de futsal, vende yuyos y trabaja en una herrería.

Todo esto lo hace en pos del sueño de la casa propia, motivado por su hijo, jugador de la Selección Guaireña de Futsal FIFA, quien suele preguntarle cuándo estará lista su vivienda.

Alejandro vende yuyos a las mañanas, luego va a una herrería donde trabaja en la fabricación de básculas hasta las 18:00 h. Finalmente, de 22:00 a 23:00 h arbitra en partidos de futsal.

“Los jóvenes hoy en día no quieren más trabajar. Tengo 30 años y siempre me gustó trabajar y no tengo vergüenza de vender remedios yuyos porque mediante eso salgo adelante”, dijo el árbitro al diario Extra.

Como sueño, además de contar con la casa propia, es estudiar en Asunción con la finalidad de ser árbitro de la APF.

Vía: Extra


“Los jóvenes no quieren más trabajar”: Árbitro yuyero lucha por el sueño de su casa propia

Por Víctor Martínez1' de lectura

El hombre tiene otros dos trabajos y su hijo le pregunta cuándo estará terminada su vivienda.