Adrián "Maravilla" Martínez estuvo en la cárcel, debutó a los 22, jugó en Sol de América, Libertad y Cerro Porteño y ahora es el flamante goleador de Racing.

Además, nunca hizo inferiores y estuvo 7 meses tras las rejas por el motivo de que lo acusaron a él y a su familia de haber quemado la casa de las personas que le habían metido 3 balazos a su hermano luego de una discusión, aunque en realidad los que vengaron este hecho fueron los vecinos.

Durante su encierro encontró la fe en Dios y le pidió que por favor le dé la chance de ser futbolista. Al comienzo, trabajó de albañil y de recolector de basura, hasta que por fin se le dio.

Arrancó en Atlanta de la 3.ª división Argentina, haciendo 15 goles en 34 partidos y llamó la atención de Sol de América, equipo con el que debutó en 1.ª división, haciendo 12 goles en 19 encuentros, de ahí lo llevó libertad, marcando 22 tantos en 2 años y medio y pasó a Cerro, único club en el que no hizo ningún gol.

Después pasó por Curitiba e Instituto, donde recuperó un buen nivel y fue fichado por Racing, donde viene arrastrando una muy buena racha, pues dio una asistencia e hizo un hat trick en la goleada 4-1 sobre San Lorenzo y le hizo un doblete a Newell's Old Boys en otra goleada 4-0 de La Academia.

Todo esto después de haber estado privado de su libertad por un crimen que no cometió y contó que cuando estaba encerrado, le daban solo 1 pan por día y dormía sobre una chapa.

_"Yo soy malo, soy burro, pateo y la pelota termina adentro. Pega en el palo y me vuelve. Los goles me los da dios. Estoy bendecido",_ declaró una vez el futbolista, que estuvo privado de su libertad por algo que no cometió y hoy ya lleva más de 100 goles como profesional. Adrián y una historia de maravilla.


El jugador que estuvo en la cárcel, jugó en Cerro, Libertad y ahora es figura en Argentina

Por Augusto Morel2' de lectura

Su primer club de primera división fue Sol de América, donde fue uno de los goleadores del año.