El Corredor Vial Bioceánico, que cruza el corazón del Chaco paraguayo, no solo está uniendo el Atlántico con el Pacífico, sino que también está priorizando el cuidado del medio ambiente y la fauna silvestre, especialmente en el tramo que se construye actualmente.

Una de las ideas más importantes del proyecto es la construcción de los "pasos de fauna", que son estructuras diseñadas para que los animales silvestres puedan cruzar la ruta de forma segura. Con esto se busca reducir el riesgo de atropellamientos y evitar que sus hábitats se dividan.

En el Tramo 1 de la ruta, que ya está terminado, se hicieron 13 pasos para animales. En el Tramo 2 se planean alrededor de 15, y ahora en el Tramo 3, que está en plena construcción, se van a instalar 13 nuevos pasos de fauna.

Reforestación y respeto a las comunidades
El proyecto no se queda solo en los pasos para animales. También incluye un plan de reforestación para reemplazar los árboles que se quitan. En los Lotes 1 y 2 del Tramo 3, por ejemplo, se van a reponer más de 14.000 plantines.

Además, el Ministerio de Obras Públicas (MOPC) está haciendo talleres con comunidades indígenas y autoridades locales, para asegurarse de que la obra respete las culturas y las tradiciones de la gente que vive en el Chaco.

El personal que trabaja en la obra también recibe capacitaciones especiales para cuidar el medio ambiente y los sitios arqueológicos, trabajando de la mano con el Ministerio del Ambiente (MADES). De esta forma, se busca que la construcción de una ruta tan importante se haga con el mayor respeto por el entorno natural y humano.


El Corredor Bioceánico avanza con un fuerte compromiso ambiental

Por Julio González2' de lectura

El proyecto prioriza la construcción de pasos de fauna y la reforestación para proteger el ecosistema del Chaco.